Nace en Tarija, el día 6 de julio de 1927.

·       Fueron sus padres don Onofre Soruco y doña Laura Arancibia.

·       Casado con doña Olga Verdúm Cossío y tubo tres hijas: Zemlya, Zonia y Violeta.

·       Fue profesor de Educación musical egresado de la Escuela Normal de Sucre.

·       Compuso muchísimas canciones; las cuales ni el mismo Nilo sabía cuántas.

Las más conocidas (Letra y música) son:

“A orillas del Guadalquivir”, “Corazón”, “Amancaya, amancayita”, “Uva, vino y sol”, “Cajita i’ Quena”, “Flor de Sama”, “Noche de San Juan”, “La Entrerriana” …

También ha recopilado canciones que, de no ser por él, se habrían perdido. Ha fundado coros como el polifónico “Tarija” y el “Universitario”.

TRAYECTORIA POLÍTICA

·       Fue miembro destacado del Partido Comunista de Bolivia. (En el exilio conocido como Caña Brava).

·       Ha merecido muchas distinciones nacionales e internacionales por su obra estética.

·       Tuvo una hemerografía desordenada, y su memoria era frágil; de modo que fue muy difícil seguir la huella de los papeles que se registraron en torno suyo.

LIBROS ESCRITOS

·       Escribió varios libros, entre los que se destacan:

“Como gato panza al sol”, un testimonio de su trabajo militante.

“Cantares de Bolivia en tiempos de historia”, guión de un disco.

“Amancayas del camino. Canciones para la infancia, Adolescencia y Juventud de mi pueblo”

·       Fue autor de una “Suite Folclórica”. En ella explaya las danzas chapacas, por épocas, como la Pascua, la Cruz, Corpus, San Lorenzo, San Roque. Esta obra fue estrenada exitosamente en un Festival Internacional de la Cultura efectuado en Sucre, en 1993.

·       Fue autor, de igual modo, de un Poema a la Libertad, escrito en el exilio, según refiere, el que fue inspirado en el libro “Las tejas de mi techo” de Bernardo Trigo Pacheco. Años después, Rubén Poma utilizaría esta composición para un video muy festejado por el público en atención al logro de los paisajes chapacos.

CARGOS QUE DESEMPEÑO

·       Fue Secretario Ejecutivo de la Confederación Nacional de Maestros de Bolivia.

·       Fue Director de la Escuela Municipal de Música Regional “Pastor Achá Martínez” de Tarija.

VIAJES Y ESPECTÁCULOS

·       Ha presentado espectáculos públicos de relieve, poniendo en evidencia su genio creador, tanto dentro del país como fuera de él.

·       Conoció muchos países, más bien por motivos de salud. Estuvo varias veces en Europa por esa causa. Sin embargo, fue uno de los primeros canta – autores bolivianos que difundió la música nacional en el extranjero.

·       Asesoró y fundo varios conjuntos musicales de renombre, los cuales lo honran cantando sus canciones.

·       Conoció cárceles y destierros. Y vivió en la clandestinidad mucho tiempo por causa de su identidad con las postulaciones revolucionarias del pueblo.

·       Vivió en el recogimiento de su soledad en la calle Corrado, de Tarija, donde animaba a sus nietos a develar su herencia artística.

·       Llevaba un marcapaso y su cerebro había sufrido un deterioro que le impedía seguir componiendo ya en sus últimos años.

PENSAMIENTOS

·       El, para sí mismo, ha recogido un pensamiento de N. Ostrovski:

 

“Lo mejor y más precioso que tiene el hombre es la vida. Se da una sola vez y hay que vivirla de tal manera que no martirice el dolor de los años vividos en vano, que no le queme la vergüenza por un pasado ruin y mezquino y que al morir pueda decir. Toda mi vida y todas mis fuerzas las entregué a los más hermoso del mundo: ¡A la lucha por la liberación de la humanidad!”.

 

Si unos rasgos generales pudieran pintar como fue Nilo, no hay nada mejor que sus propias palabras, mirándose él mismo en el pasado, fuera del país:

 

SU VIDA

“Lo intenso y extenso, fueron mi silencio y soledad interiores”.

¡Físicamente, al otro lado de su infancia, fue un viejo solitario; un poco encorvado, flaco enteramente, de cabellos ralos pero largos casi llegándole a los hombros; la cara pequeña, los ojos chicos, con una barba no cuidada del todo; severa mirada; a veces, ¡triste! Pero ¡No!. Cierta vez una dama tarijeña que le hacia un homenaje público, dijo que Nilo fue un niño “triste”. El canta – autor le respondió que nunca lo había sido.

De paso lento, caminaba como tratando de recoger su sombra que se le adelanta. Hablaba a gritos como desoyendo a su interlocutor. Miraba casi sin ver porque tenía en mente su propio mundo recogido de la soledad, a un salto de la revelación absolutamente necesaria. Porque, en verdad, Nilo ¡o se callaba o narraba su historia, tantas veces convenga para seguir siendo la fuente viva de donde todos deben beber el agua de sus reminiscencias!

Vestía sin esmero. Se diría que, para él, el atuendo no añadía nada a su espíritu. Él era antiimperialista. Y esto, justificaba todo: Hasta lo que hablaba a gritos. Lo que se destacaba en él a primera vista, era el lustre de sus zapatos … En esto era muy exigente. Lo veía por la calle, con una carpeta entre las manos o un apretado “tesoro” de papeles. ¡sabe Dios que llevaba de un lugar a otro, algo escondido, secreto, intimo …!

Nilo estaba consciente de su valor. Por esa causa, pensando que tal vez podría ignorárselo, nos recordaba que estaba vigente. Hacia declaraciones a la prensa, viajaba al interior a eventos culturales o folclóricos; dejaba escuchar su voz en la radio o daba información a los escolares cuyas tareas se referían a él. Para estos chicos, que tocaban la puerta de su casa, años tras años, no tenía a mano un currículo – vitae preparado con antelación, ¡como debiera ser! -Le bastaba su memoria.

Fue un Tarijeño de pura cepa, que hablaba como chapaco.

Para recordarnos esa postulación, escribía, que él era “Un militante firme, consecuente, que nunca jamás se cansaría de ser comunista, y más bien sería un impenitente e indomable idealista social y moral que no cambiaría jamás”.

Dentro de su jerarquía de valores, el partido Comunista ha ocupado siempre el primer lugar. Lo ha subordinado todo a él. En verdad, Nilo fue un idealista.

A mi me parece que tuvo una fuerte carga humana, más allá de su cosmovisión. Esto es precisamente, lo que vengo a rescatar ahora, para después…

Desde el punto de vista estrictamente humano, recojo una confesión suya dicha casi al oído, como si quisiera que nadie la oyera ¡Ni su sombra!: “Cada noche me acuesto pensando que, quien sabe, a la mañana siguiente me hallen muerto. Mi soledad está llena de recuerdos”… Hallo, en su voz, una premonición que se des banda hacia el silencio. Entonces, lo imagino corriendo hacia su infancia. Y, sin embargo, tiene la madura capacidad de análisis; pues, no se deja vencer por la vida. Me dice: “No tengo miedo de morir; pero la presiento”.

LUIS DE FUENTES RODRIGUEZ

Y partió en alas de la libertad un 31 de marzo, mostrándonos lo que es vivir con el ritmo cantarino de su corazón entregado y generoso, la vida es linda muchacha.